11 de septiembre de 2022
Vivimos en una cultura en la que solamente se cree aquello que se experimenta. En el plano de la vocación ocurre lo mismo. Para saber si tienes o no vocación, debes haber experimentado algunas cosas. Pero, ¿qué cosas en concreto? Fundamentalmente dos: Un encuentro personal con Dios y unas reacciones psicológicas. Las vemos con detenimiento.
Quién quiere solamente lo que Dios quiere, tendrá todo lo que quiere.